Según el abogado experto en emprendimientos, Carlos Harms, para que un extranjero cree su propia empresa pequeña o mediana (Pyme) tienen que entrar en juego las diferentes normas comerciales y de inmigración.
“Ahí efectivamente hay que distinguir si tiene residencia. Si está de forma definitiva, ahí podría desarrollar su emprendimiento”, explicó Harms.
En ese caso, la persona podría utilizar cualquiera de las dos opciones de sistema que tienen los chilenos. Está el tradicional, que se relaciona con el papeleo típico y notarios, y está el simplificado o digital llamado “Empresa en un día”, mucho más ágil.
Sin embargo, si una persona extranjera no tiene la residencia definitiva pero quiere formalizar su negocio también tiene otras opciones.
“En esos casos se recomienda que lo desarrolle con un chileno, quien va a ser el representante legal. El Servicio de Impuestos Internos (SII) necesita de una persona que pueda responder a ciertas circunstancias y notificaciones”, agregó.
De todas formas, según Carlos, siempre será recomendable que la persona extranjera realice los papeles pertinentes de inmigración. Esto también puede tener una serie de beneficios.
Fuente: Teletrece.