El renombrado escritor sudafricano Breyten Breytenbach falleció a los 85 años, dejando atrás un legado literario y artístico que trascendió fronteras. Nacido en la pequeña localidad de Bonnievale, en Cabo Occidental, en 1939, Breytenbach fue un firme defensor de la belleza del idioma afrikáans, pero también un férreo crítico de la supremacía blanca impuesta por el gobierno de Sudáfrica.
El poeta, autor y pintor se convirtió en una voz global contra el apartheid, exiliándose en París a principios de la década de 1960. A pesar de su ausencia física en su tierra natal durante décadas, su compromiso con la lucha por la igualdad y la justicia social en Sudáfrica nunca flaqueó. En 1975, un intento de regreso clandestino resultó en su arresto y posterior encarcelamiento durante siete años, dos de ellos en confinamiento solitario.
Tras ser liberado en 1982 con la ayuda del presidente francés François Mitterrand, Breytenbach regresó a Francia, donde se convirtió en ciudadano. A lo largo de su vida, escribió más de 50 libros, la mayoría en afrikáans, siendo reconocido con varios premios literarios internacionales. Su obra, marcada por metáforas complejas y referencias a la cultura sudafricana, ha dejado una huella imborrable en el mundo de las letras.
Además de su labor como escritor, Breytenbach también destacó en el ámbito artístico, dedicando su pintura a retratar figuras humanas y animales en un estilo surrealista. Su obra ha sido exhibida en diversas ciudades alrededor del mundo, desde Johannesburgo hasta París, recibiendo el reconocimiento de críticos y aficionados por igual.
A pesar de su activismo político, Breytenbach supo adaptarse a los cambios que trajo consigo la democracia en Sudáfrica en 1994. Siendo testigo de las transformaciones en su país, el escritor continuó comprometido con la causa de la justicia social, aunque no exento de críticas hacia el nuevo gobierno democrático. Su legado perdurará a través de sus escritos y su arte, recordando a las generaciones futuras la importancia de luchar por un mundo más justo y equitativo.