Un reo “endemoniado” con un historial de mala conducta al interior del recinto penitenciario protagonizó un acto de violencia extrema que conmocionó al Centro de Cumplimiento Penitenciario de Concepción el pasado 9 de diciembre. En un supuesto ritual satánico, Diego Valdés San Martín, de 41 años y condenado por homicidio, decapitó a su compañero de celda, Vincent González Aguirre, de 27 años, quien fue la víctima de este brutal asesinato.
Valdés, también conocido como el “Indio Loayza”, cumple una condena de 12 años por un asesinato cometido en 2022. Desde entonces, ha acumulado 15 sanciones por su mala conducta dentro de la cárcel. Este recluso ha sido protagonista de una serie de ataques y actos violentos en los recintos penitenciarios, lo que lo ha llevado a ser considerado un preso peligroso.
El motivo de la condena de Valdés se remonta a un homicidio cometido con un arma de fuego a principios de 2022. La víctima, que no estaba involucrada en una banda criminal rival, fue asesinada durante un enfrentamiento entre grupos delictivos en Arica. Valdés justificó su acción alegando que creyó que la víctima intentaba despojarlo de su arma, lo que lo llevó a dispararle.
Además del homicidio, Valdés ha recibido sanciones en la cárcel por agresiones a otros reclusos, fabricación de armas artesanales, amenazas, riñas, ingreso de elementos prohibidos y resistencia a las órdenes de Gendarmería. Incluso ha sido castigado por dañar dependencias de la cárcel en un intento de fabricar un arma cortopunzante.
Los cuchillos artesanales encontrados en posesión de Valdés durante su tiempo en prisión guardan similitudes con el arma utilizada en el asesinato de su compañero de celda. Este reo ha demostrado un patrón de conducta violenta y desafiante, lo que ha generado preocupación en las autoridades carcelarias y en el sistema penitenciario en general.