El gendarme argentino Nahuel Agustín Gallo fue detenido esta semana por las autoridades de Venezuela mientras intentaba ingresar al país para visitar a su familia. Gallo, cabo primero de la Gendarmería Nacional Argentina y nativo de Catamarca, Argentina, forma parte del escuadrón 27 de Uspallata, en Mendoza, y estaba de vacaciones cuando ocurrió su detención.
Se sabe que Gallo planeaba reunirse con su pareja, María Gómez, residente argentina en Caracas desde hace 6 años, junto a su hijo de 2 años. Según informes, el gendarme había volado desde Argentina a Colombia y luego planeaba cruzar por vía terrestre a Venezuela para llegar a Caracas.
Tras su detención en el aeropuerto de San Antonio del Táchira, Gallo fue trasladado a Caracas por la Dirección General de Contrainteligencia Militar. Su pareja relató que Gallo había expresado su preocupación por la situación política en Venezuela tras las elecciones presidenciales.
La ministra de Seguridad argentina, Patricia Bullrich, exigió la liberación de Gallo, denunciando su detención como un acto del régimen chavista. Bullrich instó a Maduro a liberar al ciudadano argentino, calificando su detención como un paso hacia el fin del régimen.
El caso de Nahuel Agustín Gallo ha generado preocupación tanto en Argentina como en Venezuela, y se espera que las autoridades de ambos países puedan resolver esta situación de manera rápida y justa.