Durante el pasado fin de semana, se reveló el trágico caso de Suchir Balaji, un ex empleado de OpenAI que fue encontrado sin vida en su residencia en San Francisco, Estados Unidos. Según informes de la Oficina Forense, su fallecimiento fue catalogado como un suicidio.
Suchir Balaji había concedido una entrevista al periódico The New York Times en octubre, donde acusaba a OpenAI de infringir las leyes de derechos de autor al utilizar contenido protegido para entrenar aplicaciones como el chatbot ChatGPT. Recientemente, Business Insider reveló que Balaji estaba incluido en una demanda contra la empresa, presentada por The New York Times, por el uso no autorizado de sus informaciones.
De acuerdo con Business Insider, The New York Times solicitó que Balaji fuera añadido como uno de los “custodios” en el caso judicial, ya que se creía que poseía documentos relevantes para respaldar la demanda. Se menciona que hay otras personas con vínculos anteriores con OpenAI también designadas como “custodios” en ese proceso legal.
En declaraciones anteriores, Suchir Balaji expresó su preocupación sobre el potencial daño que las empresas que desarrollan inteligencia artificial generativa pueden causar al crear productos que compiten con los datos con los que se entrenan. Tanto OpenAI como su socia, Microsoft, enfrentan múltiples demandas de medios y publicaciones por violación de derechos de autor y uso indebido de información.
Tras conocer la triste noticia del fallecimiento de Suchir Balaji, un portavoz de OpenAI emitió un comunicado a TechCrunch expresando su pesar y solidaridad con los seres queridos del fallecido en este momento tan difícil.