⭐️Puntuación EV: 8,5/10
Si me preguntan, lo primero que tengo que decir es que “Mufasa: El Rey León” me gustó bastante. Desde el inicio, la nostalgia se siente en cada escena, pero, a diferencia de otras producciones que abusan de ella, aquí se usa con elegancia y sin caer en lo cursi. Esta precuela dirigida por Barry Jenkins sabe cómo emocionar al espectador sin manipularlo descaradamente. Y, sí, lo diré desde ya: este “live action” es, por lejos, mucho mejor que “El Rey León” de 2019.
Visualmente Impecable
No se puede hablar de esta película sin detenerse en su apartado visual. El CGI está a otro nivel. Disney y Jenkins merecen un aplauso de pie porque las texturas, los paisajes y el realismo de los animales logran una inmersión total. Hubo momentos en los que me olvidé de que estaba viendo una animación. La fluidez de los movimientos y la expresividad de los personajes hacen que cada escena se sienta viva y cargada de emoción.
Una historia que emociona, aunque con sus detalles
La trama tiene sus puntos fuertes, pero también algunas lagunas. Hay partes que se sienten un poco apresuradas, como si la película tuviera prisa por llegar al siguiente gran momento. Sin embargo, el ritmo general es bueno y mantiene la atención de principio a fin. La decisión de hacer que la historia sea contada por Rafiki fue un acierto total. Este mandril carismático, junto con Zazú, aporta una perspectiva fresca y ayuda a dar equilibrio entre la acción, el drama y el humor.
Timón y Pumba: los reyes de la comedia
No puedo dejar de hablar de ellos. Timón y Pumba se roban el show cada vez que aparecen en pantalla. Fueron un “vacilón” total. Me reí como no lo hacía desde hace tiempo con una película de Disney. Sus interacciones, el humor físico y los diálogos llenos de chispa logran que el público (grandes y chicos) se mantenga conectado con la historia.
Música: Disney se redime
Si hay algo que me preocupaba era la música. Después del “fiasco” (al menos para mí) que fue la banda sonora de “Moana 2”, mis expectativas eran moderadas. Pero, ¡vaya sorpresa! Lin-Manuel Miranda se reivindicó con canciones cargadas de sentimiento y ritmos contagiosos. Las piezas musicales no solo acompañan la historia, sino que la potencian. No me extrañaría ver alguna de estas canciones nominada en la temporada de premios.
Las leonas: fuerza y protagonismo
Si hay algo que me gustó de forma especial fue el papel de las leonas en esta historia. Su rol en el desarrollo de Mufasa es fundamental, y me encantó la forma en que se aborda su influencia en su ascensión al trono. Aquí no son solo personajes de fondo, son parte esencial de la narrativa. Hay una carga simbólica poderosa en esta representación, y se agradece que Disney le diera el espacio que merecía.
Conclusión
Mufasa: El Rey León no solo supera a su antecesora de 2019, sino que se posiciona como una de las mejores adaptaciones “live action” de Disney. Barry Jenkins demuestra que sabe contar historias con alma, y esta película es prueba de ello. Con una animación de primer nivel, una historia que conmueve y personajes que brillan (Timón y Pumba, los amo), esta producción se convierte en una experiencia obligatoria para los amantes del cine. Puede que la historia tenga algunos baches, pero la emoción, el humor y la música hacen que la experiencia sea más que satisfactoria.
Si aún dudas si verla, solo te digo esto: vale la pena cada minuto.