El Gobierno Metropolitano de Seúl anunció hoy que reducirá las festividades para recibir el año nuevo como gesto de respeto hacia las 179 víctimas del trágico accidente aéreo ocurrido el domingo en el suroeste de Corea del Sur.
A pesar de que la icónica campana de Bosingak sonará a medianoche del 31 de diciembre, se han cancelado los conciertos que estaban programados para antes y después del evento.
En un emotivo homenaje a las víctimas del accidente, se erigirá una escultura de aproximadamente 30 metros de altura detrás del pabellón que alberga la campana. Además, en la plaza de Gwanghwamun se llevará a cabo una cuenta regresiva en silencio, sin efectos sonoros.
Se ha dispuesto un altar en memoria de las víctimas frente al Ayuntamiento de Seúl, y se ha solicitado a los distintos distritos de la ciudad que suspendan sus eventos tradicionales para presenciar el amanecer del 1 de enero.
Tras el accidente, el Gobierno de Corea del Sur ha decretado siete días de duelo nacional. El vuelo 7C2216 de Jeju Air, una aerolínea surcoreana, se estrelló al aterrizar sin el tren de aterrizaje extendido y chocó contra un muro en el aeropuerto de Muan, dejando un saldo de 179 fallecidos, con solo dos sobrevivientes. Este accidente se ha convertido en el más grave en la historia de la aviación civil en Corea del Sur y en el más trágico a nivel mundial en 2024.
Por EFE
Accidente aéreo en Seúl.
Lea también:
Falleció el expresidente de EE.UU., Jimmy Carter a los 100 años de edad.