El Gobierno argentino anunció este miércoles la desvinculación de 1.400 empleados del Ministerio de Salud y de hospitales públicos en todo el país, como parte de un proceso de reestructuración en el ámbito sanitario. Según un comunicado emitido por el ministerio liderado por Mario Lugones, esta medida se debe a la necesidad de optimizar los recursos humanos y a la detección de irregularidades en la contratación de personal durante la administración anterior.
La no renovación de contratos afecta no solo al Ministerio de Salud, sino también al Instituto Nacional de Servicios Sociales para Jubilados y Pensionados (PAMI) y a diversos centros de salud, como el Hospital Español, Hospital Bonaparte, Hospital Sommer, Hospital Posadas, Hospital René Favaloro, el Instituto Nacional del Cáncer y la Secretaría de Políticas Integrales sobre Drogas (Sedronar), entre otros establecimientos, según informó La Nación.
El Gobierno de Javier Milei aseguró que esta decisión no afectará el funcionamiento habitual de las funciones y se suma al recorte del 30 % en cargos políticos que se realizó a principios de año. Estas medidas buscan garantizar la transparencia en la gestión y cumplir con una de las directrices principales del Ministerio de Salud de la Nación, que es ser eficiente y cuidar los recursos de todos los argentinos.
A través de sus redes sociales, el presidente mostró su apoyo a la medida con un mensaje en la plataforma X: “Afuera. Continuamos con la motosierra”, comentó en respuesta al anuncio oficial. El martes, el personal de salud llevó a cabo un abrazo en la sede del Ministerio de Salud en protesta por el cierre de programas sanitarios en todo el país, incluyendo aquellos destinados a la lucha y prevención de enfermedades como tuberculosis, hepatitis, lepra y VIH SIDA.