Establecer un contrato angelical puede ser una poderosa forma de conectarte con tu ángel de la guarda y recibir su protección. Este ritual te permite solicitar la ayuda y bendición de tu ángel para tus deseos, lo que puede brindarte una sensación de paz y confianza al saber que cuentas con el apoyo divino.
Para recibir la bendición de tu ángel de la guarda, puedes realizar un contrato angelical que te permitirá conectar con su energía protectora. Los ángeles están disponibles para asistirte en todas tus necesidades, siempre y cuando los invoques sinceramente desde tu corazón. Al pedir su apoyo, recibirás la guía de los guardianes angelicales que velan por ti, estableciendo así una relación profunda con los seres celestiales.
El primer paso para hacer un contrato angelical es identificar la situación específica en la que necesitas la ayuda de tus ángeles. Puedes pedir su bendición para eventos importantes, entrevistas de trabajo, exámenes, cirugías, o incluso para mejorar aspectos de tu vida. Es fundamental que sepas lo que necesitas y lo solicites con sinceridad.
Una vez identificada la necesidad, cierra los ojos, sonríe y concéntrate en tu petición. Repite con fe las palabras que soliciten la ayuda de los ángeles de luz, adaptando la oración a tu deseo específico. Es crucial hacerlo con el corazón abierto y confiar en que los ángeles escucharán tu petición y te brindarán su apoyo.
Posteriormente, debes contratar a un ángel especializado en el área en la que necesitas ayuda. Por ejemplo, si buscas protección, puedes decir: “Contrato a un ángel guardaespaldas para guiar y mantener a salvo a mi familia”. Este ángel será el encargado de cuidar y proteger a tus seres queridos en todo momento, asegurándose de que no corran ningún peligro.
Finalmente, visualiza cómo tu deseo está protegido por el ángel que has contratado. Imagina que este guardián está guiándote y cuidando de tu petición en todo momento, asegurándose de que se cumpla. Agradece con amor y gratitud por la asistencia del ángel invocado, fortaleciendo así tu conexión con los seres celestiales y reconociendo la ayuda divina recibida.