El ministro de Relaciones Exteriores de Chile, Alberto van Klaveren, respondió a la decisión de Venezuela de cerrar los consulados chilenos en Caracas y Puerto Ordaz como parte de la suspensión de las relaciones diplomáticas entre ambos países. Van Klaveren señaló que esta medida impactará tanto a los 12 mil ciudadanos chilenos residentes en Venezuela como a los venezolanos con vínculos en Chile.
Según el ministro, esta acción confirma las características de la dictadura venezolana y Chile se encuentra evaluando las medidas a tomar en respuesta. Tras la expulsión de los diplomáticos chilenos y la retirada de los diplomáticos venezolanos en Chile, se han suspendido los servicios consulares.
Ante esta situación, Chile podría recurrir a un tercer país para realizar labores consulares que no se puedan llevar a cabo en Venezuela, o implementar servicios a distancia de forma remota.
Por otro lado, el Partido Comunista, a través de su líder Lautaro Carmona, minimizó el cierre de los consulados chilenos en Venezuela, argumentando que las relaciones entre ambos países pueden tener diferentes niveles. Carmona también expresó su deseo de que Chile reduzca sus relaciones con Israel y muestre preocupación por la política de Trump.
En este sentido, Carmona destacó la importancia de mantener las relaciones internacionales para la interconexión entre países, ya que los gobiernos son transitorios pero los Estados y los pueblos son permanentes.