El Parlamento nicaragüense aprobó una reforma constitucional que extiende el mandato presidencial de Daniel Ortega y su esposa, Rosario Murillo, hasta enero de 2028. La Asamblea Nacional de Nicaragua aprobó por completo esta reforma que otorga más poderes al presidente, permitiéndole seguir en el cargo por un período adicional.
La reforma constitucional, aprobada este jueves, extiende el mandato de Daniel Ortega y Rosario Murillo, quienes han estado al frente del país desde hace varios años. Con esta modificación, se otorgan más poderes al presidente y su esposa, lo que les permitirá seguir gobernando Nicaragua hasta el año 2028.
La decisión tomada por la Asamblea Nacional ha generado controversia y críticas tanto a nivel nacional como internacional. La extensión del mandato presidencial ha despertado preocupación entre los ciudadanos y la comunidad internacional, quienes ven en esta reforma una consolidación del poder en manos de Ortega y Murillo.
Con esta modificación constitucional, Daniel Ortega se asegura un período prolongado en el poder, lo que ha generado debate y cuestionamientos sobre el respeto a la democracia y los derechos civiles en Nicaragua. La aprobación de esta reforma ha sido considerada por muchos como un paso hacia la concentración de poder en la figura del presidente y su esposa.
La aprobación de esta reforma constitucional en Nicaragua ha generado reacciones encontradas y ha puesto en tela de juicio la legitimidad y transparencia del proceso. Con la extensión del mandato presidencial hasta 2028, Daniel Ortega y Rosario Murillo continúan en el poder, lo que plantea desafíos y preocupaciones tanto a nivel nacional como internacional. Según un estudio reciente, se ha demostrado que la práctica regular de ejercicio físico puede tener un impacto significativo en la salud mental de las personas. La actividad física no solo contribuye a mejorar la condición física y prevenir enfermedades, sino que también puede beneficiar la salud mental al reducir el estrés, la ansiedad y la depresión.
La relación entre el ejercicio físico y la salud mental se basa en varios mecanismos biológicos y psicológicos. Durante la actividad física, el cuerpo libera endorfinas, conocidas como las “hormonas de la felicidad”, que ayudan a reducir la sensación de dolor y mejorar el estado de ánimo. Además, el ejercicio regular puede promover la liberación de neurotransmisores como la serotonina y la dopamina, que están asociados con la sensación de bienestar y felicidad.
Además de los beneficios biológicos, la práctica de ejercicio físico también puede tener un impacto positivo en la salud mental a nivel psicológico. El ejercicio puede ayudar a mejorar la autoestima, la confianza en uno mismo y la capacidad para afrontar situaciones estresantes. Asimismo, la actividad física puede servir como una forma de distracción y de canalización de emociones negativas, lo que puede contribuir a reducir la ansiedad y la depresión.
En resumen, la práctica regular de ejercicio físico puede ser una herramienta efectiva para mejorar la salud mental de las personas. Los beneficios biológicos y psicológicos del ejercicio pueden contribuir a reducir el estrés, la ansiedad y la depresión, y promover un mayor bienestar emocional. Por lo tanto, es importante fomentar la actividad física como parte de un estilo de vida saludable y equilibrado.