La Policía de Israel ha utilizado cañones de agua para tratar de dispersar a los cientos de manifestantes que se congregaron este jueves en las cercanías de la vivienda del primer ministro, Benjamin Netanyahu, en Jerusalén. La protesta tenía como objetivo mostrar descontento hacia el Gobierno y su intención de destituir al jefe del Servicio de Inteligencia Nacional (Shin Bet), Ronen Bar.
Los manifestantes iniciaron una marcha desde el campus de la Universidad Hebrea hasta la residencia privada de Netanyahu, ubicada en el barrio de Nehavia. A su llegada, se encontraron con agentes de la Policía fronteriza que bloquearon los accesos a la calle donde se encuentra la vivienda del primer ministro. En un intento por resistir, algunos manifestantes levantaron pequeñas barricadas.
Además de los cañones de agua, los agentes de la Policía empujaron a algunos de los manifestantes, incluido el líder del partido progresista Los Demócratas, Yair Golan. Vídeos publicados en redes sociales y recogidos por la prensa local muestran estos actos de violencia policial, lo que ha desatado una controversia en el país. Otros políticos han salido a condenar la actuación de las fuerzas de seguridad.
El ex primer ministro y actual líder de la oposición, Yair Lapid, ha condenado enérgicamente la violencia policial y ha expresado su apoyo a Yair Golan, ex subjefe del Estado Mayor del Ejército de Israel. Lapid ha solicitado al comisario de la Policía, Daniel Levy, que ordene una investigación inmediata sobre el incidente.
El consejo de ministros tiene previsto votar este jueves la destitución de Ronen Bar como jefe del Shin Bet. Esta medida ha generado críticas por parte de la oposición israelí y de parte de la ciudadanía, quienes consideran que se trata de un castigo por la investigación del servicio de Inteligencia que reveló una presunta trama de corrupción entre el Gobierno, Qatar y la financiación del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás).
La utilización de la fuerza por parte de la Policía de Israel para dispersar a los manifestantes que protestaban pacíficamente en las inmediaciones de la residencia de Netanyahu ha generado un fuerte debate en el país. La oposición ha condenado la actuación policial y ha pedido una investigación sobre los hechos. La destitución de Ronen Bar como jefe del Shin Bet también ha suscitado críticas, ya que se percibe como una represalia por su trabajo en la lucha contra la corrupción. La situación política en Israel se mantiene tensa, con manifestaciones y protestas que reflejan la división y el malestar de la ciudadanía.
## Incendios Forestales en Bío Bío y la Araucanía: Una Amenaza Constante En las últimas…
Violencia escolar: Instituto Nacional activa protocolo de Ley Aula Segura El Instituto Nacional de Santiago…
Gobierno venezolano reduce horario laboral en instituciones públicas debido a la sequía El Gobierno de…
Grave deterioro de la salud del exdiputado Américo de Grazia en medio de la crisis…
Pensionados en Venezuela esperan el pago del bono de Guerra Económica Desde el viernes 21…
La UE lista para ayudar en la reconstrucción de Gaza y rechaza participación de Hamás…