Con la llegada del invierno, el frío y la lluvia vuelven a instalarse en la rutina diaria. Entre los más afectados por las bajas temperaturas están nuestros animales de compañía, quienes, a diferencia de los humanos, no siempre cuentan con un refugio adecuado o una forma eficaz de conservar el calor. Esto ha generado un debate frecuente: ¿deberíamos vestir a nuestras mascotas?
Según la médico veterinaria Carolina Ruiz, de la tienda especializada SuperZoo, la respuesta depende de varios factores. “Cuando las temperaturas bajan, no solo nosotros necesitamos más abrigo. Las mascotas también sienten el frío, y por eso es importante reforzar nuestra atención en su bienestar durante el invierno”, explica.
¿Qué animales necesitan abrigo?
El pelaje y la grasa corporal actúan como una primera barrera natural frente al frío. Sin embargo, no todos los animales están igualmente preparados. “Razas pequeñas, animales mayores o aquellos con pelo corto son más vulnerables”, advierte Ruiz.
Los signos de que una mascota puede estar sufriendo por las bajas temperaturas incluyen temblores, letargo, rechazo al paseo y búsqueda constante de lugares cálidos. En estos casos, el uso de abrigo está más que justificado.

Cómo elegir la ropa adecuada
Más allá del diseño o lo estético, lo primordial es que la prenda se ajuste correctamente al cuerpo del animal sin interferir en sus movimientos. “Debe ser cómoda, proteger del frío y la humedad, e idealmente estar confeccionada en algodón o fibras naturales”, recomienda la experta.
Leslie Betanzo, jefa de marketing retail de SuperZoo, señala que “existen prendas de invierno suaves por dentro y con aislantes por fuera para evitar el viento. También hay opciones impermeables y reflectantes, ideales para salidas nocturnas y días de lluvia”.
Cuidados complementarios al abrigo
El vestuario no es lo único que se debe considerar en época invernal. Estos son algunos cuidados esenciales:
Espacios cálidos y sin corrientes de aire
Es fundamental que las mascotas cuenten con un lugar seco y protegido del viento para descansar. Evita dejarlas al aire libre o en patios sin resguardo.
Alimentación rica en nutrientes
Algunos animales pueden requerir un ajuste en su dieta. Los alimentos con alto contenido de proteínas y grasas saludables ayudan a mantener su energía y temperatura corporal.
Higiene y cuidado del pelaje
El pelaje es un aislante natural, por lo que debe mantenerse limpio y libre de nudos. Se recomienda cepillarlo regularmente y evitar los baños innecesarios durante los días más fríos.
Precaución en los paseos
Las salidas deben ser más breves pero frecuentes, idealmente en horarios menos fríos. A la vuelta, es importante secar bien a tu mascota, especialmente sus patas, ya que el contacto con el suelo helado puede afectar sus almohadillas.

Vestir a una mascota en invierno no es una cuestión de moda, sino de salud y bienestar. Identificar cuándo es necesario y aplicar los cuidados adecuados marcará la diferencia para que nuestros compañeros de cuatro patas atraviesen el invierno de forma segura, cómoda y feliz.