El Debate sobre la Eliminación del Pago de Contribuciones a la Primera Vivienda en Chile
El ministro de Hacienda, Mario Marcel, ha generado controversia tras su reciente declaración sobre la propuesta de eliminar el pago de contribuciones a la primera vivienda. Durante una conferencia de prensa, Marcel advirtió que esta medida podría beneficiar principalmente a las comunas más acomodadas del país, como Vitacura y Lo Barnechea, a expensas de los ingresos municipales de las comunas más vulnerables.
La Propuesta y su Contexto
La iniciativa, respaldada por la Unión Demócrata Independiente (UDI) y presentada previamente por los Republicanos, busca eximir del impuesto territorial a las viviendas habitacionales. Sin embargo, para Marcel, la propuesta no es neutra. Señaló que los fondos recaudados por contribuciones representan aproximadamente 800 millones de dólares anuales, los cuales se destinan “íntegramente a las municipalidades”.
“Para el conjunto de municipalidades, en promedio, representa un 15% de sus ingresos propios”, explicó el ministro. Además, reveló que el 45% de esta recaudación proviene de las comunas de barrio alto de Santiago, como Las Condes, Vitacura, Lo Barnechea, Providencia y La Reina. Este dato es crucial para entender el impacto que tendría la eliminación de este impuesto.
Beneficios Desiguales
Marcel proporcionó ejemplos concretos de cómo se verían beneficiadas las comunas acomodadas. En Lo Barnechea, el beneficio promedio sería de $3,3 millones por vivienda para unas 28 mil propiedades afectas a impuesto territorial. Sin embargo, destacó que “no son las del Cerro 18, sino que las de La Dehesa”, lo que pone de manifiesto la desigualdad en la distribución de los beneficios.
En Vitacura, el promedio de beneficios alcanzaría los $2,2 millones al año, mientras que en Las Condes, sería de $1,2 millones. Marcel también hizo hincapié en que el volumen de propiedades en Las Condes podría generar $133 mil millones de beneficios únicamente en esa comuna.
La Brecha entre Clases Sociales
El análisis del ministro también se extendió a la comparación del beneficio según el valor comercial de las viviendas. Una propiedad de 20 mil UF (equivalente a unos $800 millones) podría recibir una rebaja de $2,5 a $3 millones anuales, mientras que una vivienda de clase media, valorada en 3 mil UF, no obtendría ningún beneficio. Este contraste resalta cómo la propuesta podría aumentar aún más la brecha entre clases sociales, favoreciendo a los más adinerados.
El Impacto en Comunas Vulnerables
Marcel fue categórico al señalar que el costo de estos beneficios recaería sobre las comunas más pobres del país. “¿Quién pagaría esos millones en beneficios para los habitantes de Barnechea?” se preguntó. La respuesta es clara: las comunas vulnerables, que dependen de la recaudación del impuesto territorial proveniente de las viviendas de barrio alto.
El ministro concluyó su intervención advirtiendo que el impacto sería nacional. “Tendríamos una comuna rural en el sur de Chile que vería reducidos sus ingresos, solo porque haya una exención para propietarios de Lo Barnechea o Vitacura”, enfatizó, subrayando que las decisiones fiscales deben considerar sus efectos en todo el territorio nacional.
Conclusiones y Reflexiones Finales
La discusión sobre la eliminación del pago de contribuciones a la primera vivienda pone de relieve la complejidad de las políticas fiscales en Chile. Si bien la propuesta puede parecer atractiva para algunos sectores de la población, sus implicaciones son profundas y potencialmente desiguales. La advertencia de Mario Marcel resuena como un llamado a la reflexión sobre la equidad en la distribución de recursos y la responsabilidad que tienen las políticas públicas en la vida de los ciudadanos más vulnerables.
En un país donde la desigualdad sigue siendo un tema candente, es crucial que las decisiones sobre impuestos y beneficios no solo se tomen desde una perspectiva de corto plazo, sino que también consideren su impacto a largo plazo en la cohesión social y el bienestar general de la población. La voz de los líderes, como Mario Marcel, debe ser escuchada con atención, y el debate debe continuar para encontrar un camino que beneficie a todos los chilenos, sin dejar a nadie atrás.