AFP. En América Latina y el Caribe, se contabilizaron en 2018 4,2 millones de personas que padecen inseguridad alimentaria y que necesitan ayuda urgente (Haití con 2,3 millones), América Central (El Salvador, Guatemala, Honduras y el “Corredor Seco” de Nicaragua con 1,6 millones), y América del Sur (0,4 millones, incluyendo los migrantes venezolanos en Colombia, Ecuador y Perú).
Venezuela, que atraviesa una grave crisis económica y política que ha desencadenado una severa escasez de alimentos y una hiperinflación que ha reducido drásticamente el poder adquisitivo, no figura en este informe debido a que no se dispone de cifras fiables, explicó a la AFP Dominique Burgeon, jefe de situaciones de emergencia de la FAO.
Pero podría ingresar en el ránking 2019 de países que se enfrentan a graves crisis alimentarias tras la obtención de datos recientes, aseguró Burgeon, quien expresó su “preocupación” por la situación en el país latinoamericano.
El informe sí contabiliza en cambio a alrededor de 1,5 millones de venezolanos que han buscado refugio en tres países vecinos, Colombia, Ecuador y Perú, y que tienen grandes dificultades para garantizar su alimentación.
Al menos 360.000 de ellos atraviesan una “crisis alimentaria aguda” y 600.000 están en la fase 2
Según el Programa Mundial de Alimentos (PMA), el 30 % de los migrantes venezolanos en Colombia (de un total de 1.1 millones) sufren malnutrición. En Ecuador son 38 % (de un total de 221.000 que han buscado refugio en ese país) y en Perú 14% (sobre un poco más de 500.000).
La FAO expresa también su preocupación sobre la situación en Colombia, que es a la vez un país de tránsito y de destino para los venezolanos que cruzan la frontera, y que además de esto tiene todavía 487.000 personas vulnerables desplazadas por décadas de conflicto armado dentro del país.
En el mundo
Más de 113 millones de personas en 53 países sufrieron hambre extrema en 2018, debido principalmente a conflictos armados, catástrofes naturales y crisis económicas, según un informe publicado este martes.
Los países más afectados por la hambruna fueron Yemen, República Democrática del Congo y Afganistán, señala la última edición del informe mundial sobre crisis alimentarias elaborado por la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), la Unión Europea (UE) y otras organizaciones internacionales.