Marco Rubio advierte que en Venezuela detienen estadounidenses para negociar con ellos.
Marco Rubio, el hijo de inmigrantes cubanos elegido por Donald Trump como jefe de la diplomacia de su futuro gabinete, se presenta en el Senado en su audiencia de confirmación como secretario de Estado de Estados Unidos.
Rubio habló sobre el hemisferio occidental en donde, aludiendo a Venezuela, afirmó que hay “narcoterrorismo, dictadores y déspotas que aprovechan las fronteras abiertas para promover la migración masiva, para traficar mujeres y niños y llenar a nuestras comunidades de fentanilo y criminales violentos”
“En Teherán, Moscú y Pionyang, dictadores y estados están costeando grupos terroristas y luego se esconden en su poder de veto en el Consejo de Seguridad de la ONU”, afirmó.
También expresó que ahora existe un “mercado global activo para detener a estadounidenses injustamente en Venezuela, Rusia, China o Irán” para “luego utilizarlos y crear algo que desean en el futuro”.
“Y por eso creo que es necesario crear una mayor conciencia sobre esa realidad. Aunque la gente todavía va a viajar, los estadounidenses siguen siendo personas libres que tienen la capacidad de viajar. Este es un riesgo real”, advirtió.
Además, hizo pronunciamientos que giraron alrededor de la guerra en Ucrania y la dependencia de países como Alemania de la energía rusa.
Rubio se somete a un examen de sus colegas senadores en una audiencia para confirmarlo en el cargo, que se anuncia sin contratiempos y lo convertiría en el primer hispano al frente del Departamento de Estado.
Según fragmentos de su discurso, Rubio apuntó contra China, a la que el presidente saliente demócrata Joe Biden también considera un país rival.
Rechazó uno de los principios clave de Biden: priorizar un “orden mundial liberal” basado en reglas y liderado por Estados Unidos. Defenderá, por el contrario, el lema de Trump “Estados Unidos primero”.
“El orden global de la posguerra no solo está obsoleto, ahora es un arma que se utiliza contra nosotros”, dijo según fragmentos escritos de su discurso.
Rubio, quien habla español con fluidez, abogó por centrar la política exterior estadounidenses en decisiones que contribuyan a que Estados Unidos sea más seguro, fuerte y próspero.
“Mientras Estados Unidos continuó priorizando el ‘orden global’ por encima de nuestros intereses nacionales fundamentales con demasiada frecuencia, otras naciones siguieron actuando como los países siempre han hecho y siempre lo harán”, en base a “lo que más les beneficia”, precisó en el discurso.
Su comparecencia tiene lugar un día después de que Biden decidiera retirar a Cuba de la lista de países que patrocinan el terrorismo para propiciar la liberación de manifestantes encarcelados en la isla.
Lo anunció casi exactamente cuatro años después de que Trump, al dejar el cargo, volviera a incluir a Cuba en la lista negra.
Rubio, cuyos padres emigraron de Cuba antes de la revolución de Fidel Castro en 1959 y se opusieron a los comunistas, ha abogado durante años por una acción contundente contra Cuba, Venezuela y Nicaragua.
Senador durante tres mandatos, es apreciado por sus colegas y muy conocido entre los hispanos. En 2016 fue rival de Trump en las primarias republicanas.
El miércoles también se someterán al examen de los senadores Pam Bondi, una abogada de confianza de Trump elegida para el cargo de fiscal general y secretaria de Justicia.
También comparecerá el miércoles Kristi Noem, candidata a secretaria del Departamento de Seguridad Interior, encargado de la protección de aduanas y fronteras y de la gestión de la migración.
De ser confirmada desempeñaría un papel crucial en la deportación masiva de migrantes en situación irregular prometida por Trump.
La gobernadora de Dakota del Sur ganó puntos entre los republicanos por su oposición a las restricciones de la pandemia de covid-19, pero generó una fuerte polémica tras confesar que ha matado de un disparo a su perra porque era “indomable”.