La tormenta Éowyn azota al Reino Unido con intensidad, siendo considerada la más fuerte de la última década, según informes de la Met Office, el servicio meteorológico británico. Desde el viernes, cerca de un millón de personas se han visto afectadas por este fenómeno climático, principalmente en Irlanda y Escocia.
Los vientos violentos, que alcanzaron un récord de 183 km/h en Irlanda, han provocado la caída de objetos y árboles, ocasionando tragedias. Un hombre de 20 años perdió la vida al ser aplastado por un árbol que cayó sobre su vehículo en Donegal, Irlanda. Asimismo, tres jóvenes fallecieron en un accidente en Wakefield, al norte de Inglaterra, al chocar contra un árbol caído en la carretera.
Aunque la intensidad de la tormenta ha disminuido, aún se registran fuertes ráfagas de viento y precipitaciones significativas en Gran Bretaña e Irlanda. La Met Office ha emitido una alerta amarilla por viento, hielo y nieve en Escocia e Irlanda del Norte, mientras se espera la llegada de una nueva área de bajas presiones desde el suroeste el domingo.
Las autoridades de Irlanda del Norte han señalado que se necesitarán varios días para evaluar los daños causados por la tormenta Éowyn. A pesar de que se espera que la nueva área de bajas presiones no tenga el mismo impacto que Éowyn, podría complicar las labores de recuperación y generar inundaciones en zonas ya saturadas por las lluvias previas.
En resumen, la tormenta Éowyn ha dejado un rastro de destrucción en el Reino Unido, con pérdidas humanas y daños materiales significativos. Las autoridades continúan trabajando para evaluar la magnitud de los estragos causados por este fenómeno meteorológico.