El presidente Nicolás Maduro presentó su propuesta de reforma constitucional ante la Asamblea Nacional, en un intento por actualizar la Constitución de la República vigente desde 1999, establecida por Hugo Chávez.
Maduro delineó cuatro puntos clave que sustentarían los cambios que pretende implementar en el país. Entre ellos, se destacan la “democracia participativa”, economía, inteligencia artificial, comunicaciones y la penalización del fascismo.
En primer lugar, el mandatario propuso la ampliación y perfeccionamiento de la democracia participativa protagónica y la inclusión del Poder Comunal, Social y Popular en el nuevo sistema de Estado democrático.
En cuanto a la construcción de una nueva sociedad, Maduro enfatizó la importancia de definir los parámetros, valores y principios para una sociedad más humana desde el bolivarianismo, con la mira puesta en el futuro y los valores que regirán en 2025.
El presidente también abogó por la inclusión en la Constitución de artículos que penalicen cualquier amenaza fascista, neofascista, sionista u expresiones similares, subrayando la necesidad de establecer las penas correspondientes de forma estricta.
Asimismo, planteó la creación de una Inteligencia Artificial venezolana y el desarrollo de una capacidad tecnológica soberana en este ámbito, junto con la diversificación de la economía del país hacia un modelo más autosostenible y justo.
Finalmente, Maduro solicitó una actualización de la Constitución en términos jurídicos, constitucionales y políticos, para abordar las nuevas realidades del país en un contexto global y perfilar un nuevo modelo económico que se adapte a las necesidades actuales de Venezuela.