Luna Espejo.
El Presidente Interino de Venezuela, Juan Guaidó, convocó para el miércoles 1 de mayo a una marcha masiva para “exigir por el cese de la usurpación, a que se termine esta tragedia”, según lo expresado por él en un acto público al este de Caracas.
Además de esto, la concentración del #1M tiene la intención de presionar a Nicolás Maduro para que abandone el poder.
Bajo la etiqueta #VamosConTodo1M, el mandatario encargado volvió a recalcar dos de sus más imperativas demandas: “haremos la movilización más grande de nuestra historia para exigir el cese de la usurpación y el gobierno de transición”.
La marcha convocada por la oposición venezolana el 19 de abril no tardó en tener respuestas por parte de grupos oficialistas, debido a que la mañana del 25 de abril 12 viviendas amanecieron marcadas con “+ELN” y un panfleto del Ejército de Liberación Nacional.
El Ejército de Liberación Nacional (ELN), un grupo guerrillero extremo, a través de una amenaza de muerte hizo una advertencia a 11 dirigentes opositores y 1 sacerdote del estado Táchira, respecto a si asistían a la marcha convocada por el líder opositor.
Junto a las marcas de cruces y las letras referentes al grupo guerrillero, también se encontraba un panfleto en donde el “ELN Frente Gustavo Villamizar” hace un llamado a los “aliados de la revolución” para estar alertas ante “todos los posibles atentados que se vienen realizando desde el imperio y sus aliados, Colombia y Brasil” y, además de esto, declara “objetivos políticos, enemigos públicos de la revolución, traidores y apátridas” a aquellas personas que según su criterio “Obstaculizan… las políticas sociales del presidente Nicolás Maduro Moros” en referencia a los dirigentes opositores y demás asistentes a la marcha.