El presidente iraní, Hassan Rouhani, ha entregado su primera reacción a la muerte del líder militar Qasem Soleimani, asegurando que el ataque fue un “acto cobarde” y “otra señal de la frustración de América e impotencia en la región”.
El jefe de la Fuerza Quds fue asesinado en un ataque de los Estados Unidos ordenado por el presidente Donald Trump y destinado a “disuadir futuros planes de ataque iraníes”, dijo el Pentágono.
Rouhani, así como otros oficiales de alto mando, también prometió venganza por su muerte. “Indudablemente, la gran nación de Irán y otras naciones libres de la región tomaremos venganza por este terrible crimen por los criminales americanos”, dijo en un comunicado publicado por la agencia de noticias oficial de Irán.
Rouhani también valoró los logros de Soleimani, llamándolo un héroe de la historia iraní que defendió contra el terrorismo.
“Condeno este cruel acto pero, al mismo tiempo, honro el brillante servicio de este valiente y duradero héroe de la historia de Irán, quien defendió la integridad territorial del país y lideró la lucha contra el terrorismo y el extremismo en la región”.
El presidente extendió así sus condolencias al Líder Supremo, comandante en jefe, el pueblo de Irán, las Guardias Revolucionarias, los seres queridos de las víctimas y, especialmente, la familia de Soleimani, dice el comunicado.
El Pentágono dijo que Soleimani y su Fuerza Quds fueron responsables de la muerte de cientos de estadounidenses y miembros en servicio de la coalición, así como de la lesión de miles más.
El Pentágono también culpó al general iraní de orquestar ataques a bases de la coalición en Irak en meses recientes, incluyendo un ataque el 27 de diciembre.
Fuente: CNN Chile