La Corte Penal Internacional (CPI) ha emitido una orden de detención contra el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, así como contra el ex ministro de Defensa de Israel, Yoav Gallant, y el alto funcionario de Hamás, Mohammed Diab Ibrahim Al-Masri, conocido como Mohammed Deif. Según la CPI, existen “motivos razonables” para creer que Netanyahu es responsable de crímenes de guerra, incluyendo el uso de la inanición como método de guerra y crímenes de lesa humanidad como asesinatos y persecuciones.
Las órdenes de detención emitidas abarcan crímenes cometidos entre octubre de 2023 y mayo de 2024. Sin embargo, Israel ha impugnado la competencia de la CPI para emitir estas órdenes, argumentando que no es miembro del tribunal.
Además, la CPI también ha emitido una orden de detención contra Mohammed Diab Ibrahim Al-Masri por crímenes de lesa humanidad, incluyendo asesinato, tortura, violación y otros actos de violencia sexual. A pesar de que Israel afirma que Al-Masri murió en un ataque aéreo en septiembre, Hamás no ha confirmado su fallecimiento.
Estas acciones legales han generado controversia y tensiones en la región, especialmente entre Israel y Hamás. La comunidad internacional está atenta a los desarrollos de este caso, que podría tener repercusiones significativas en el ámbito de los derechos humanos y la justicia internacional.