Jorge León – venezolanoenchile.com
Les contaré esta experiencia que, afortunadamente, no llegó a mayores pero que les puede servir para solucionar si algún día les sucede y para que tomen previsiones.
Sin duda, Yapo es el directorio más popular del país. Su gran mancha es que no ofrece ningún tipo de verificación, lo cual hace que se preste más para este tipo de situaciones.
Quería vender un producto y recurrí a Yapo para hacerlo. Publiqué el aviso y, apenas media hora después, recibí una llamada de un hombre muy interesado en mi producto. Me pidió detalles específicos de funcionamiento y referencias del estado en el que se encontraba, sin importar que toda esa información estaba en la publicación.
Luego de responder todas sus preguntas, dijo que me escribiría por WhatsApp para coordinar la entrega. Ya por chat, me indicó que él no era de Santiago pero que su hijo retiraría el producto en el lugar que acordáramos y, que estando allí, luego que su hijo verificara el producto, él me depositaba y todos felices. Insistió en que era necesario que mi cuenta fuera del Banco Estado porque era el banco que tenía cerca. Tomando previsiones le dije que si esa era la manera, yo prefería hacer la entrega en una estación de metro.
Minutos después, me escribió de nuevo preguntándome si la entrega tenía que ser en una estación, que si no podía ser en otro lado… Yo mantuve mi posición, así que finalmente aceptó.
La cita
A la hora acordada, llegué a la estación y esta persona me pasó un contacto por WhatsApp con el número de su hijo. Lo llamé, nos encontramos y revisó el estado del producto. Se comunicó con su papá y le dijo que todo estaba en orden, que ya podía hacer el depósito.
Algo que me llamó la atención fue que ambas personas tenían en su perfil de WhatsApp fotos de un bebé. Pensé que podía ser el hijo de cada quien, así que no le presté atención.
Otro detalle fue que la persona con la que me encontré tenía muy mal aspecto y parecía estar drogada. Y, de hecho, en la conversación, durante la espera de la transferencia, me confesó que “tenía problemas con la marihuana que no le permitían vivir con normalidad”.
Ya en este punto yo estaba incómodo y tenía el presentimiento de que la venta no iba a prosperar, pero me repetía internamente que mientras el dinero estuviera en mi cuenta, todo lo demás no era mi problema.
Unos minutos después, recibí la llamada confirmándome que el depósito estaba hecho, así que entré por mi teléfono a revisar la cuenta y me percaté de que el dinero no salía disponible sino que estaba en la sección “Retenciones”. Lo llamé para preguntarle que cómo me había depositado porque el dinero me salía retenido y me dijo que en efectivo pero que “cuando son montos altos, por más que sea en efectivo, se tarda 1 o 2 horas en aparecer como disponible”.
Obviamente, eso no tiene ningún sentido. Así que le dije que llamaría al banco para verificar antes de entregarle a su hijo el producto (todo esto con el tipo en frente). Al comunicarme con el banco me dicen que el depósito fue realizado con “documento” (cheque) y que si es del mismo banco se haría efectivo al siguiente día hábil pero que si es de otro banco, se haría efectivo al segundo día hábil.
Luego de saber esto me comuniqué con el comprador nuevamente y le volví a preguntar que cómo me había depositado. Me insistió que el depósito había sido en efectivo y cuando le dije que en el banco me dijeron que había sido con cheque, respondió: “es lo mismo”.
En ese momento, ya estaba totalmente seguro de que la venta no iba a completarse y que se trataba de un intento de estafa, así que le dije que no le entregaría nada hasta que el dinero estuviese disponible en mi cuenta. El hijo me exigió tomarle una foto a mi RUT porque ya me habían depositado y esa era la única garantía que podían tener para cuando el dinero estuviera disponible, retirar el producto. Como me negué, me dijo que no podía seguir perdiendo su tiempo, que su papá veía qué iba a hacer con eso e inmediatamente se fue.
Como era de esperarse, nunca más me contactaron y el día siguiente el dinero desapareció de “Retenciones” y nunca pasó a “Disponible”.
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- Son 2 personas para que no haya dinero en efectivo en la transacción.
- Se inventan una historia de padre e hijo.
- La cuenta debe ser del Banco Estado porque hay cajeros automáticos en los que puedes depositar sobres con cheques..-Buscan hacer la entrega en un lugar donde ellos tengan ventaja.
- Probablemente el mal aspecto de la persona sea para intimidar.
Dinero “retenido”. Al depositar un sobre con cheque, deben introducir la cantidad depositada en pantalla y luego el sobre con los cheques. En la cuenta receptora sale el monto en “Retenciones”. Los estafadores meten un sobre vacío y cuando se van a procesar los depósitos en el banco, se dan cuenta de que no hay nada en el sobre, eliminan la transacción, el monto desaparece de las “Retenciones” y nunca se hace disponible.
Sin rastro. En Banco Estado no queda registro de la transacción. Tengo una captura de pantalla del dinero en la sección de “Retenciones” pero al ir al banco, insisten que como nunca se trató realmente de dinero, no se ve en los movimientos. Es decir, en mi estado de cuenta no hay rastros de que esto sucedió.