La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha alertado sobre el alto riesgo para la salud pública de la nueva variante clado Ib de la viruela símica (mpox), así como el riesgo internacional de difusión, lo que mantiene al brote como una emergencia de salud pública. Esta información se desprende del informe número 43 sobre la situación sanitaria actual, el cual destaca las últimas tendencias epidemiológicas, incluida la presencia del mpox en África.
Según el documento, el clado Ib afecta principalmente a zonas no endémicas de viruela en la República Democrática del Congo y países vecinos, donde la viruela se propaga principalmente a través del contacto físico humano, incluido el contacto sexual. En contraste, la OMS califica como alto el riesgo general para la salud pública del clado Ia y de moderado el riesgo nacional e internacional de difusión. Se especifica que el clado Ia afecta principalmente a zonas endémicas de mpox en la República Democrática del Congo, con casos esporádicos en otros países de África Central y Oriental.
El Comité de Emergencias del Reglamento Sanitario Internacional de 2005 (RSI, 2005) fue unánime el pasado 22 de noviembre al expresar que el recrudecimiento en curso del mpox cumple con los criterios de una emergencia de salud pública de importancia internacional (ESPII). Asimismo, el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, coincidió con esta opinión y formuló recomendaciones temporales revisadas para la organización.
En este contexto, la OMS ha intensificado sus esfuerzos para contener la propagación de esta nueva variante de la viruela símica y proteger la salud pública a nivel internacional. Es fundamental seguir de cerca las indicaciones y recomendaciones de las autoridades sanitarias para prevenir la expansión de esta enfermedad.
En conclusión, la OMS ha señalado que el riesgo general para la salud pública de la variante clado Ib de la viruela símica (mpox) es alto, al igual que el riesgo internacional de difusión. Por tanto, es crucial mantenerse informado y tomar las medidas necesarias para proteger la salud de la población en general.