Ocho sitios naturales ganaron el título de Geoparque de la Unesco, incluyendo tres latinoamericanos, por ser “ejemplos de la diversidad geológica de nuestro planeta”.
Con estas nuevas designaciones aprobadas por el Consejo Ejecutivo de la Unesco, la red internacional de Geoparques Mundiales de la Organización de Naciones Unidas para la Ciencia, la Cultura y la Educación, cuenta ahora con 147 sitios en 41 países.
Kütralkura en Chile, que en el idioma de los mapuches significa “Piedra de Fuego”, es uno de los espacios naturales seleccionados por la organización con sede en París.
Situado a unos 700 km al sur de Santiago, este geoparque se extiende por el este hasta la frontera con Argentina y se caracteriza por poseer algunos de los volcanes más activos del mundo, como los de Llaima, Lonquimay, Tolhuaca y Nevados de Sollipulli.
Imbabura, en Ecuador, también fue integrado en la prestigiosa lista de la Unesco. Este nuevo Geoparque es famoso por su gran número de lagos y sus magníficas formaciones geológicas, como las Cascadas de Peguche, señaló la organización en un comunicado.
La cumbre montañosa más elevada del sitio es el volcán Cotacachi, que se eleva a 4.939 metros de altura y está situado dentro del perímetro de la Reserva Ecológica de Cotacachi-Cayapas.
La reserva Colca y Volcanes de Andagua, en Perú, también se ganó el título de “geoparque” gracias a su “vasto y variado conjunto de terrenos volcánicos, lagos y fallas geológicas, así como vestigios arqueológicos prehispánicos e iglesias del periodo colonial”, detalló la Unesco.
Entre los sitios europeos designados están las Montañas do Courel, en el noroeste de España, una región de pequeñas aldeas y monasterios cuyos orígenes se remontan a la época medieval.
La Unesco destacó que este territorio “está surcado por valles profundos y cañones formados por la erosión” y que en algunas cuevas profundas de las montañas “hay vestigios bien conservados de la fauna y flora prehistóricas, así como pinturas del Periodo Neolítico”.