Un grupo de activistas de Greenpeace llevó a cabo una audaz protesta al asaltar un buque cisterna que se disponía a cargar productos químicos plásticos en el puerto de Daesan, en Corea del Sur. La acción tenía como objetivo denunciar la producción de plásticos tóxicos en un momento crucial, ya que las negociaciones sobre el Tratado Global sobre Plásticos de la ONU se encuentran en una fase decisiva en Busán.
Los activistas, procedentes de varios países como Alemania, México y Reino Unido, exigieron a los gobiernos que se enfrenten a la presión de la industria petroquímica y reduzcan de manera contundente la producción de plástico.
La protesta se llevó a cabo en el buque Buena Alba, una embarcación de 96 metros de largo que estaba a punto de cargar propileno, un químico derivado de los combustibles fósiles utilizado en la fabricación de plásticos. Durante la protesta, los activistas montaron tiendas de campaña en el mástil del barco.
Alex Wilson, voluntario del equipo de escalada de Greenpeace Reino Unido, expresó: “Estamos tomando medidas directas hoy aquí, deteniendo este envío de plástico, para instar a los líderes mundiales a escuchar las voces de millones de personas que exigen la reducción de la producción de plástico para detener la contaminación plástica”.
El incidente se produce en medio de un informe del Centro para el Derecho Ambiental Internacional (CIEL) que revela la presencia de más de 220 lobistas petroquímicos en las negociaciones en Busán, la cifra más alta registrada hasta la fecha, según Greenpeace.
Greenpeace ha advertido sobre el aumento continuo de la producción de plástico a pesar de las crecientes preocupaciones sobre la contaminación plástica, lo que podría consumir hasta el 31% del presupuesto de carbono global necesario para limitar el calentamiento a 1,5°C.
Graham Forbes, jefe de la delegación de Greenpeace, instó a los gobiernos a tomar decisiones firmes en este momento crítico, señalando que un tratado sin un compromiso de reducción de la producción no resolvería las crisis del plástico ni del clima. Las negociaciones sobre el Tratado Global sobre Plásticos concluirán el 1 de diciembre en Busán, Corea del Sur.