Las autoridades peruanas han anunciado que las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional asumirán el control de la ciudad de Trujillo, en el oeste del país, tras el atentado perpetrado contra la sede de la Fiscalía en esa localidad.
El Gobierno de Perú condenó enérgicamente el acto de terrorismo urbano ocurrido en Trujillo y anunció la toma de control de la ciudad en el marco del estado de emergencia, con el objetivo de garantizar la seguridad de la ciudadanía.
A través de sus redes sociales, la Presidencia peruana reiteró su rechazo a los “ataques terroristas de bandas criminales” y aseguró que no se detendrá ante estos actos viles, trabajando en conjunto con el gobierno regional y las autoridades municipales para mantener el orden y proteger a los habitantes de La Libertad.
El ataque a la sede de la Fiscalía en Trujillo se produjo con explosivos que podrían estar vinculados a la minería ilegal, según la titular del Ministerio Público, Delia Espinoza. La fiscal también señaló que el edificio ya había sido amenazado con anterioridad.
Ante esta situación, las autoridades peruanas han tomado medidas para garantizar la seguridad en Trujillo y proteger a la población de posibles actos de violencia.