Miles de palestinos han comenzado su regreso al norte de la Franja de Gaza en cumplimiento del alto el fuego acordado entre Israel y Hamás. Este alto el fuego, que entró en vigor el 19 de enero, puso fin a más de 15 meses de ofensiva israelí en respuesta a los ataques del 7 de octubre de 2023.
La autorización para el regreso de los palestinos ha sido confirmada por el portavoz en árabe del Ejército de Israel, Avichai Adrai. Se han establecido condiciones específicas para el regreso, con horarios y rutas designadas para garantizar la seguridad de la población.
El ministro de Defensa de Israel, Israel Katz, ha asegurado que se aplicará estrictamente el alto el fuego y que aquellos que lo violen enfrentarán las consecuencias. El retorno de los desplazados se considera una victoria para el pueblo palestino y un fracaso para la ocupación.
Hamás ha destacado la importancia del retorno de los desplazados como un mensaje de resistencia y firmeza frente a los intentos de desplazamiento. La Yihad Islámica también ha elogiado el retorno de los palestinos al norte de Gaza como una respuesta a quienes buscaban expulsar al pueblo palestino.
El ministro de Seguridad Nacional de Israel, Itamar Ben Gvir, ha criticado el regreso de los palestinos, calificándolo como una rendición total. Sin embargo, el retorno de los desplazados se llevó a cabo después de que Hamás acordara liberar a varios rehenes, un punto importante del acuerdo de alto el fuego.
En resumen, el regreso de los palestinos al norte de Gaza marca un hito en el proceso de reconciliación tras meses de conflicto. A pesar de las críticas y desafíos, este retorno simboliza la resistencia y la determinación del pueblo palestino en su lucha por sus derechos legítimos y la paz en la región.