Desde septiembre de 2024, la comuna de Valparaíso ha experimentado una notable mejora en su sistema de transporte público con la incorporación de 44 buses eléctricos. Estos vehículos, que operan en cinco servicios distintos (E01 a E05), han logrado movilizar a más de 483.564 pasajeros en un total de 30 mil viajes realizados hasta diciembre del mismo año.
El Seremi de Transportes y Telecomunicaciones, Benigno Retamal, ha expresado su satisfacción ante los resultados obtenidos, destacando la importancia de continuar mejorando la calidad, eficiencia y seguridad del servicio para el beneficio de la ciudadanía.
Un dato sorprendente es que, desde su implementación, ninguno de los buses eléctricos ha sufrido actos de vandalismo, lo que refleja un compromiso ciudadano en el cuidado de estos modernos vehículos. Retamal señaló que esta actitud demuestra la adopción de un cambio cultural positivo por parte de los usuarios.
En cuanto al impacto en cifras y sostenibilidad, el sistema de buses eléctricos ha logrado beneficios concretos, como la mejora en la calidad del aire al reducir las emisiones de CO2, PM y NOx, la disminución de la contaminación acústica urbana, ahorros operativos significativos en comparación con los buses de combustión, y una mayor satisfacción por parte de los usuarios debido a la comodidad y eficiencia de los vehículos.
El servicio E03, que conecta Placilla de Peñuelas con la estación Barón, ha sido el más utilizado en 2024, movilizando a 241.782 pasajeros, especialmente por su integración con otros medios de transporte. Durante la temporada estival, el trazado del servicio E05 se ajustó para abarcar el sector Playa Las Torpederas, lo que resultó en un incremento significativo en la cantidad de pasajeros transportados.
Esta iniciativa forma parte del programa gubernamental de electromovilidad, el cual tiene como objetivo que para el año 2040, el 100% del transporte público sea libre de emisiones, en línea con los objetivos de la Política Energética Nacional. La autoridad ha destacado que este es solo el inicio de un cambio necesario en las ciudades, demostrando que la tecnología y el compromiso ciudadano pueden transformar la forma en que nos movemos.