Karol Cariola bajo la lupa por sus vínculos con empresario chino
La reciente incautación del teléfono celular de la diputada Karol Cariola en el marco de la investigación por un presunto tráfico de influencias en el caso Sierra Bella ha revelado una nueva arista que involucra al empresario chino Emilio Yang. La Fiscalía ha decidido investigar los aportes entregados por Yang a Cariola, así como su relación con la ex alcaldesa de Santiago, Irací Hassler.
Según información publicada por La Tercera, Emilio Yang proporcionó dinero a Karol Cariola durante su campaña de reelección a la Cámara Baja, además de financiar algunos proyectos de la Municipalidad de Santiago durante la gestión de Hassler. Esta revelación ha generado gran controversia y ha puesto a la diputada comunista en el ojo del huracán.
La verdadera identidad del empresario de 31 años es Bo Yang, quien comenzó a viajar a Chile en 2012 y actualmente tiene residencia permanente en el país, tramitando su nacionalización. Se le considera un experimentado lobbista, habiendo oficiado como guía y traductor de parlamentarios chilenos que viajaron a Beijing, la capital china.
Además de sus estrechos vínculos con Karol Cariola, Emilio Yang es socio en dos compañías con el diputado y presidente del partido Amarillos, Andrés Jouannet, según una investigación realizada por Ciper. Estas conexiones han levantado sospechas sobre posibles conflictos de interés y prácticas poco éticas en la política chilena.
Pero Yang no es el único empresario chino que está en la mira del Ministerio Público por sus relaciones con la diputada comunista. Se ha descubierto que el departamento en el que reside Karol Cariola en la comuna de Providencia es propiedad desde 2017 de otro hombre de negocios asiático, Hong Chen. Este empresario es parte de varias sociedades comerciales y tiene una fuerte presencia en el Barrio Meiggs de Santiago.
Según reportes de La Tercera, Hong Chen adquirió el inmueble en diciembre de 2017 por un valor de $317 millones, y la Fiscalía está tratando de establecer sus vínculos con la presidenta de la Cámara de Diputados y el tipo de acuerdo al que llegaron para que el inmueble sea ocupado por la parlamentaria comunista. Esta situación plantea interrogantes sobre posibles influencias indebidas y relaciones opacas en el ámbito político chileno.
En conclusión, la investigación en curso sobre los vínculos de Karol Cariola con empresarios chinos como Emilio Yang y Hong Chen pone de manifiesto la necesidad de una mayor transparencia y ética en la política del país. Es fundamental que se esclarezcan estos casos y se establezcan medidas para prevenir futuros conflictos de interés y prácticas corruptas en el ámbito legislativo. La ciudadanía espera respuestas claras y acciones concretas para garantizar la integridad del sistema democrático chileno.