Maduro pide a Bukele que entregue a migrantes venezolanos deportados por EE.UU.
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ha solicitado a su homólogo de El Salvador, Nayib Bukele, que entregue a su país a los 238 migrantes venezolanos que fueron deportados por Estados Unidos y enviados al Centro de Confinamiento del Terrorismo (CECOT) en territorio salvadoreño.
Durante un acto público, Maduro expresó su desacuerdo con las afirmaciones de Estados Unidos de que los deportados son delincuentes, y negó rotundamente esta acusación. En un mensaje dirigido a los ciudadanos salvadoreños, instó a Bukele a no respaldar la medida de deportación, calificándola como un "secuestro".
"Que Nayib Bukele no sea cómplice de este secuestro, porque nuestros muchachos no cometieron ningún delito en Estados Unidos, ninguno", afirmó Maduro ante sus seguidores. "No los llevaron a ningún juicio, no les dieron derecho a la defensa, derecho al debido proceso, fueron engañados, esposados, montados en un avión, secuestrados y enviados a un campo de concentración en El Salvador".
Maduro hizo un llamado a la liberación de los deportados y solicitó a El Salvador que los entregue de vuelta a Venezuela lo antes posible. Hasta el momento, tanto la Presidencia de El Salvador como el Departamento de Estado de EE.UU. no han emitido comentarios al respecto.
Deportación de migrantes venezolanos por EE.UU. y tensiones internacionales
Los 238 migrantes venezolanos fueron deportados por Estados Unidos bajo la acusación de pertenecer a la organización delictiva El Tren de Aragua, recientemente designada como terrorista y considerada una amenaza para la seguridad nacional. Junto a ellos, también fueron deportados 23 salvadoreños, todos enviados al CECOT en El Salvador como parte de un acuerdo entre los países.
A pesar de las afirmaciones de EE.UU., hasta el momento no se han presentado pruebas que sustenten la pertenencia de los deportados a grupos criminales. El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) ha declarado que realizaron una revisión cuidadosa de los perfiles de las personas en cuestión para verificar sus vínculos delictivos.
La acción de deportar a los migrantes venezolanos ha desencadenado tensiones diplomáticas entre Estados Unidos y Venezuela, así como protestas sociales en ambos países. En Caracas, ciudadanos se manifestaron contra la deportación, asegurando que algunos de los deportados son familiares suyos y exigiendo su regreso a Venezuela.
Hasta el momento, los nombres de los deportados no han sido revelados por ningún Gobierno implicado en la situación, generando incertidumbre y preocupación en la población venezolana.
Conclusiones
La situación de los 238 migrantes venezolanos deportados por Estados Unidos y enviados a El Salvador ha generado una controversia a nivel internacional. Las acusaciones de pertenecer a grupos criminales por parte de EE.UU. han sido cuestionadas por el Gobierno venezolano, que exige la liberación y repatriación de los deportados.
En medio de esta disputa diplomática, la incertidumbre y preocupación sobre el destino de los migrantes deportados se mantienen, mientras que la comunidad internacional observa atenta el desarrollo de los acontecimientos. Es fundamental que se respeten los derechos humanos de estas personas y se garantice un proceso justo y transparente en su situación migratoria.
Con información de CNN