La Revolución Espiritual de “The Chosen” en Chile
Hay historias que llegan a la pantalla y otras que atraviesan el alma. The Chosen es de esas últimas. No solo por lo que cuenta, sino por cómo lo hace. En tiempos donde la fe parece un asunto lejano o rígido, esta serie logra algo que parecía imposible: mostrar a un Jesús real, cercano, que sonríe, que se enoja, que abraza y que, sobre todo, entiende. Y ahora, por primera vez, esa experiencia pisa suelo chileno. No como espectáculo, sino como encuentro. Uno que te mira a los ojos y te dice: “estoy contigo”.
Un Encuentro que Resuena
The Chosen llegó a Chile con una muestra física en el evento cristiano Discipularte, y no fue al azar. “Aquí hay gente de muchas naciones: Argentina, Ecuador, Colombia, Perú. Eso refleja el ADN de The Chosen”, explica Claudia Guerrero, representante regional de la serie en nuestro país. A pesar de que la instalación fue más pequeña que en México, su impacto fue igual de profundo al participar de una breve, pero intensa experiencia inmersiva de The Chosen: “Sabemos que la gente ha salido muy tocada con lo que se vive adentro”, remarcó Claudia.
Un Fenómeno Espiritual y Cultural
Justamente, estas instancias dejan aún más en claro que, The Chosen ya no es solo una serie. Es un fenómeno espiritual, cultural y comunitario. Su apuesta por una narrativa audiovisual distinta, lejos del tono solemne o aleccionador, ha revolucionado la manera de contar historias bíblicas. Ahora, a poco del estreno de la esperada quinta temporada, su llegada a Chile marca un nuevo punto de inflexión.
¿Qué Tiene “The Chosen” que Conecta Tanto con la Audiencia?
Claudia lo explica de forma contundente: “La gente ve a un Jesús más humano. Ya no es ese ser etéreo, inalcanzable, como lo mostraban antes las películas. Acá la gente se identifica con los personajes. Muchos me dicen: ‘me veo reflejada en Pedro, en María Magdalena, en sus luchas, en su redención’. Y eso es lo más potente: la identificación”.
Ese vínculo emocional ha sido clave en el éxito global de The Chosen. Desde su primera temporada tuvo un efecto transformador. Cada capítulo toca fibras profundas. Y esto, para Claudia, no es casual: “Nuestro creador, Dallas Jenkins, quería mostrar un Jesús auténtico. Uno que viviera como humano, que entendiera lo que sentimos. Y creo que lo logró”.
Una Serie Financiada por el Corazón
Desde su creación en 2017, The Chosen ha desafiado las reglas del juego en la industria audiovisual. Se convirtió en uno de los mayores proyectos de crowdfunding de la historia, recaudando más de 40 millones de dólares gracias a su comunidad. En total, las cuatro primeras temporadas han sido vistas por millones en más de 55 países. Solo en taquilla, sus estrenos han recaudado cerca de 200 millones de dólares.
Y lo más interesante: los fans no solo financian, también participan. Muchos han sido extras en las grabaciones. “Son parte de la historia que aman”, dice Claudia. Esa sensación de comunidad es única.
Jesús Cercano, Como Nunca Antes
La mayor diferencia de The Chosen con otras representaciones de Jesús está en su enfoque. Aquí, el Mesías ríe, duda, sufre, abraza. Es un hombre de carne y hueso, sin filtros, sin solemnidad innecesaria. “Es la primera vez que vemos a Jesús así, como alguien que de verdad nos entiende”, dice Claudia.
Ese enfoque también ha generado críticas. Algunos sectores conservadores cuestionaron de forma pública las libertades creativas, la inclusión del elenco diverso o el enfoque emocional. Pero la serie ha resistido firme, sin renunciar a su esencia.
Cuando le preguntamos qué significa The Chosen en su vida, Claudia no duda: “Me ayudó a romper con la rigidez religiosa que traía desde niña. Me permitió ver a Cristo como una persona real, cercana, no como una figura lejana. Me cambió por dentro”.
Se emociona al recordar al personaje con el que más se identifica: Nicodemo. “Esa lucha entre las viejas estructuras y lo nuevo, entre el deber y la fe, fui yo. Pero ya crucé ese río. Ahora solo quiero abrazar a Jesús y seguir conociéndolo”.
Más que una Serie, un Fenómeno Espiritual
The Chosen no es solo entretenimiento. Es una puerta abierta a otra forma de vivir la fe. Un espacio donde se habla de exclusión, perdón, dolor y redención con un lenguaje visual contemporáneo. Y sin importar la creencia, lo que deja es claro: Jesús está al lado, no por encima.
Claudia lo resume de una manera impecable: “Queremos que cada persona que vea esta serie sienta que Jesús la comprende, que la recibe, que la ama. No se trata de religión. Se trata de una relación.
Al final, “The Chosen” más que una serie, es un espejo donde muchos encuentran su propia historia, sus dudas y sus esperanzas. Es una puerta a la búsqueda de respuestas. Nos recuerda que la espiritualidad no está en dogmas rígidos, sino en la cercanía humana, en la búsqueda constante de sentido y amor auténtico. Que, más allá de las pantallas, la verdadera transformación sucede cuando permitimos que ese Jesús humano y divino, imperfecto y perfecto, toque nuestro corazón y nos invite a caminar juntos. Y en ese camino, quizás, todos podemos ser un poco más elegidos.
La quinta temporada de The Chosen que lleva como título “La última cena” se estrena este 13 de julio en Prime Video para Latinoamérica con ocho capítulos.
