El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, reveló que la base naval de Guantánamo en Cuba será utilizada como centro de detención para aproximadamente 30,000 inmigrantes irregulares. Esta decisión fue anunciada por el mandatario durante una ceremonia en la Casa Blanca, donde señaló que la base servirá para albergar a “los peores criminales ilegales que amenazan al pueblo estadounidense”.
Trump no detalló más sobre la medida, pero destacó que algunos de los inmigrantes son considerados tan peligrosos que no se confía en que sus países de origen los retengan, por lo que serán enviados a Guantánamo. Esta propuesta ha generado controversia, especialmente debido a la falta de fondos suficientes para llevar a cabo lo que el presidente describió como “la mayor deportación masiva” en la historia de Estados Unidos.
La secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, explicó que se está evaluando la cantidad de recursos necesarios para acondicionar Guantánamo y recibir a los 30,000 inmigrantes. Por otro lado, el régimen de Cuba rechazó el anuncio de Trump, argumentando que se trata de un acto de brutalidad que involucra la ocupación ilegal de territorio cubano y la ubicación de inmigrantes junto a cárceles de tortura y detención ilegal.