Gendarmería realizó un allanamiento en cuatro pabellones del Centro de Detención Preventiva (CDP) de Quillota, logrando la incautación de 26 teléfonos celulares, 79 armas blancas, 24 cables USB, clorhidrato de cocaína, cannabis sativa, tusi y otros artículos prohibidos. Este operativo se llevó a cabo en un área donde se encuentran 372 personas privadas de libertad, representando el 56% de la población penal del recinto.
El coronel Héctor Inostroza Orellana, director regional (s) de Gendarmería Valparaíso, resaltó la importancia de esta intervención, indicando que contribuye significativamente a la seguridad tanto interna como externa del penal. Según sus palabras, estas acciones son fundamentales para evitar incidentes violentos dentro de la cárcel y mantener la estabilidad del ambiente.
El allanamiento forma parte de un plan de control carcelario diseñado para prevenir delitos, confiscar objetos prohibidos y garantizar el orden en las instalaciones penitenciarias. Estas medidas tienen como objetivo principal mantener la seguridad de los internos, del personal penitenciario y de la comunidad en general, evitando alteraciones en el régimen interno que puedan derivar en situaciones peligrosas.